Por Jorge Fernández Díaz |
Además de autopercibirse un personaje desmesurado de una ópera de Puccini, el Presidente también se sueña como un célebre “piloto de tormentas”: Carlos Pellegrini, que asumió en medio de un caos económico, llevó a cabo una serie de reformas dolorosas con alto costo social, soportó críticas altisonantes y al final “se abrochó el frac, se puso la galera y se fue caminando a su casa aguantando los insultos”, como le contó el actual jefe del Estado a su amigo Nicolás Márquez: “Yo quiero ser el Pellegrini del siglo XXI”. Márquez recuerda ese deseo presidencial en un flamante ensayo biográfico llamado Milei, la revolución que no vieron venir (Hojas del Sur) que firma junto con el periodista Marcelo Duclos y que se lanzará formalmente el miércoles en la Feria del Libro con un “presentador sorpresa”.