El sábado 14 se reúne
la convención partidaria para decidir cómo afrontar las elecciones
presidenciales. Las distintas posturas. Qué pasa en Salta.
Cobos, Sanz y Alfonsín, algunos de los más importantes actores que influirán en la convención de la UCR. |
Por José Montenegro
“Este es un momento muy duro para la Argentina”, comienza
diciendo un documento que el presidente del radicalismo nacional, Ernesto Sanz,
hizo llegar a los convencionales partidarios de todo el país.
Es que la UCR debatirá, en la convención nacional del
próximo sábado 14 de este mes, en Gualeguachú, Entre Ríos, hacia dónde dirigirá
su rumbo para afrontar las elecciones presidenciales de este año que, en varios
casos, irán “enganchadas” en varios comicios provinciales que adelantarán sus
procesos.
Sanz, en su documento, dice que “la frase que más se escucha
hoy en nuestros hogares y nuestras calles es ‘esto no puede continuar así’. Y
quienes dicen esto, que son la mayoría, nos miran a nosotros”. Es probable que
el presidente nacional del radicalismo no esté equivocado, pero su aserto tiene
varios matices: por un lado, gente que espera que el radicalismo logre
encabezar alguna opción opositora poderosa frente al kirchnerismo (y sus diversos
matices peronistas o neoperonistas); apoye a alguno de los precandidatos
presidenciales mejor ubicados, o que asuma el riesgo de afrontar los procesos
electorales yendo con sus propios candidatos. Hay más variantes, de seguro,
pero estas serían las principales.
En el primer caso, la UCR motorizó el Frente UNEN junto al
socialismo y otras fuerzas pero defecciones, desencuentros y las sombras de las
otras variables, terminaron minando ese frente que, prácticamente, ha
desaparecido de los primeros lugares con alguna expectativa.
El apoyo a alguno de los presidenciables con mejores
posibilidades, es, hoy por hoy, la discusión que coloca al radicalismo en una
verdadera encrucijada. A esta situación hay que sumarle la tercera posibilidad
que es que la UCR lleve sus propios candidatos.
Sanz propone, en su documento, que la UCR promueva “un
acuerdo amplio de las fuerzas de la oposición para competir en un espacio
electoral compartido en las PASO”. Pero Sanz
ya blanqueó que, en la convención del sábado, apoyará un acuerdo con el PRO de
Mauricio Macri quien hoy, está encabezando al menos dos encuestas nacionales.
Pero Julio Cobos, el otro precandidato presidencial, no está
convencido de esto y más bien apuntaría a apoyar al Frente Renovador de Sergio
Massa quien ya acordó con Gerardo Morales, en Jujuy; José Cano, en Tucumán ; Luis
Naidenoff, en Formosa a los que sumarían el santacruceño Eduardo Costa y el
fueguino Federico Sciurano.
En cuanto a la tercera posición, es decir, que la UCR lleve
sus propios candidatos, es el espacio que viene siendo impulsado por Ricardo
Alfonsín. De todos modos, el bonaerense no vería con malos ojos sumarse a la
postura de Morales y Cobos de un acuerdo con Massa.
Por estas horas, tanto Sanz como Alfonsín están operando
sobre los convencionales de todo el país para apuntalar sus respectivas
posiciones. Incluso, Sanz habría mantenido una serie de reuniones con Gerardo Morales
para convencerlo que apoye el acuerdo con Macri, haciéndole saber que el PRO le
daría a la UCR la mitad de los cargos legislativos nacionales en cada distrito
e incluso, que los postulantes radicales encabecen esas boletas con lo cual el
radicalismo, ante un eventual triunfo en las nacionales, obtendrían un importante
número de legisladores en el Congreso con lo que acotaría cualquier margen de
maniobra que intente el kirchnerismo.
Alfonsín criticó esta postura de Sanz y le cuestionó que
pretenda fortalecer un eventual acuerdo con el PRO solamente “para ingresar más
concejales, intendentes o gobernadores radicales".
Morales, en tanto, no da el brazo a torcer, aún, pero frente
a esto, Alfonsín ya le habría sacado al jujeño la promesa de que, en caso de triunfar
la postura de Sanz en la convención, todo el partido se encolumnará detrás de
la decisión mayoritaria a fin de evitar un quiebre del centenario partido.
En Salta
En el distrito salteño, no son pocos los desorientados con
lo que ocurrirá en el orden nacional a través de la convención. Pero sí hay un
fuerte cuestionamiento (por ahora subterráneo) al actual presidente y
precandidato a la Gobernación, Miguel Nanni.
Es que el joven senador del radicalismo salteño no ha
llevado a cabo ningún tipo de reunión partidaria con los principales dirigentes
provinciales, ni ha llamado a la convención y ni siquiera ha convocado a los
convencionales nacionales para tratar de aunar criterios respecto de la
posición que llevarán a la ciudad entrerriana de Gualeguaychú.
Al margen de estas cuestiones, otra vez la UCR nacional se
encuentra en una nueva encrucijada donde los dirigentes van a poner en juego
todos los valores, sus propias ideas y sus conveniencias. Aglutinar todo estos
en una sola postura, será el gran desafío radical.
© Agensur.info
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