 |
| Mario Pontaquarto pide su absolución en la causa por coimas en el Senado. |
El juicio por las supuestas coimas en el Senado durante el
debate por la reforma laboral de 2000 está a punto de caerse, luego de que este
jueves el abogado del arrepentido Mario Pontaquarto pidiera su absolución ante
el Tribunal Oral Federal 6, por no haberse comprobado ninguna de las
acusaciones en su contra.
El juicio seguirá el martes con el alegato de la defensa del
expresidente Fernando De la Rúa y luego será el turno de los abogados del exjefe
de la Side Fernando De Santibañes y el resto de los senadores procesados por el
juez federal Daniel Rafecas.
Rafecas basó su acusación en el relato del exsecretario
administrativo del Senado, quien en diciembre de 2003 se presentó ante la
Justicia como un arrepentido y dijo haber entregado el dinero para que los
senadores peronistas que aprobaron la reforma.
Pero el juez también se basó en el registro de llamadas
telefónicas para comprobar la ubicación de los senadores el 26 de abril de
2000, cuando según su propio relato Pontaquarto pagó 5.000.000 de pesos en un
maletín, una valija y una caja de cartón que había retirado de la Side.
Sin embargo, el Tribunal comprobó que los registros
telefónicos no son precisos porque pueden rastrear la ubicación en un radio de
varias cuadras. Tampoco hubo pruebas de que el dinero haya salido de la Side.
La sentencia será en diciembre pero se estima que caídas las
pruebas el juicio no tiene razón de ser y los procesamientos quedarán nulos.
El mayor complicado será Rafecas, a quien el Tribunal podría
recusar ante el Consejo de la Magistratura por su actuación.
El juez no quedó en buenos términos contra el Gobierno luego
de avanzar en las denuncias contra Amado Boudou.
Pontacuarto
Hugo Wortman Yofre, abogado de Pontaquarto, pidió este
jueves a la mañana la absolución para su defendido ante el beneficio de la duda
que existe por no haberse comprobado ninguna de las acusaciones.
“La confesión de nuestro pupilo ha carecido de un correlato
de evidencia”, por lo que “no hay pruebas para condenar” a los acusados, dijo
el abogado al leer su alegato ante el Tribunal Oral Federal 6 que juzga al ex
presidente Fernando de la Rúa y otros siete imputados.
Consideró que Pontaquarto “no es un arrepentido”, en el
sentido jurídico del término, sino un “cooperador de la justicia”, ya que
“confesó por el peso de su conciencia y sólo espera benevolencia” de la
Justicia.
Destacó que el ex secretario administrativo “no estuvo
obligado a decir la verdad” por encontrarse bajo amparo del artículo 18 de la
Constitución Nacional, que exime a los acusados de un delito de declarar en
contra de sí mismo, y definió su actitud como “una autoimposición pero no una
prueba en sí misma” de los hechos confesado.
0 comments :
Publicar un comentario