Por Martín Risso Patrón |
«Timerman se confundió de fecha, me dijo que había sido durante el gobierno de Cámpora y metí la pata en la declaración de prensa».
[Confesión pública y tuitera de la Presidente de la República Argentina
Cristina Fernández por sus declaraciones en Viet Nam].
De no creer
El asunto es que estamos asistiendo a la preocupante situación que, dada
la costumbre de que suceda constantemente en nuestra módica realidad nos haya
provocado cierta cómplice indiferencia, ahora se traslade a la solemne y
flemática alfombra de las relaciones políticas internacionales la
práctica del manoseo de la Historia nacional por parte de la mujer que ostenta
la máxima responsabilidad republicana. Y además, que haga un vergonzante
show tuitero de ello.
Es preocupante en primer lugar, que al abrir la boca lo hace
ante la prensa internacional, representando a la Cultura, la Historia y la
política del país, siendo responsable de lo que dice, y en segundo lugar, que con
eso nos representa.
Decir que Cámpora fue quien reconoció al gobierno de Viet Nam en el 73,
errándole a la fecha y al firmante del reconocimiento [con aval parlamentario],
que fue el General Perón, es en concreto, una supina gota, pesada, de
ignorancia. Pero, afirmar en una red social que el funcionario diplomático
de mayor rango [para colmo de males: no de carrera], le hizo meter la
pata, es ya un signo de que la cosa pasa a mayores, porque [obviando lo
coloquial, ya de por sí cholulo] Ella ratifica su cruda
ignorancia.
Es preocupante que nuestra Presidente incurra en esta doble
sintomatología:
Ignorar algo fundamental para la política exterior argentina, y para zafar,
echarle la culpa a su próximo subalterno, otro ignorante, según queda
demostrado en el falso dato que le suministró.
Por el mismo precio, tenemos más y liquidamos
Durante la visita al país vietnamita, Ella afirmó muy
suelta de cuerpo, que Hô Chí Mihn [que otras veces se hizo llamar Nguyễn Ái
Quốc, “el patriota”, o Nguyễn Tất Thành...], dictador comunista de Viet
Nam del Norte (1954-1969), era igual que San Martín y Belgrano, juntos...
¿Qué es eso de andar por ahí comparando al General José Francisco de
San Martín, cuyas campañas fueron decisivas para las independencias de
la Argentina, Chile y el Perú, con Hô Chí Mihn, poeta, político y dictador comunista
vietnamita? Nada tienen que ver sus respectivas campañas ni por el
contexto histórico, ni por el contenido ideológico, ni por la praxis política y
militar con que ambos manejaron sus vidas. Idéntico señalamiento le hago
respecto de su referencia a Manuel José Joaquín del Corazón de Jesús
Belgrano, intelectual, economista, periodista, político, abogado y militar de
las Provincias Unidas del Río de la Plata [nuestra actual República
Argentina].
Señora Presidente de la República, dadas estas dos vergonzantes muestras
de irresponsabilidad institucional en su legítimo ejercicio de la máxima
Magistratura política argentina, le ruego asuma la responsabilidad que le
compete de conocer la Historia nacional, para evitar convertirse usted en una
lamentable imagen de la ignorancia del sustrato que aún nos queda de identidad
que es, precisamente la Historia, sus hombres y sus hechos. Porque si no, como
lo ratifica al afirmar cuando escuchó al presidente anfitrión dar precisos
datos de nuestra Historia: “Casi me caigo de la silla...”, los
gobernantes extranjeros conocerán mejor nuestro país que usted... Y eso, de
preocupante, se convierte en trágico.
[Edición impresa, en: Semanario "Nueva Propuesta", viernes
25-ene-13]
© MRP
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