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| El juez Pablo Farah, en diálogo con los periodistas tras los trámites judiciales de este jueves. |
“Hasta acá la carátula es ‘muerte dudosa’ y va a seguir con
esa carátula todo el tiempo que necesaria para incorporar con un criterio
amplio de la investigación, todas las pruebas que sean necesarias”, afirmó el
juez Pablo Farah, a cargo de la causa por la muerte de las jóvenes Yanina Nüesch
y Luján Peñalva, cuyos cuerpos fueron hallados el lunes pasado, colgados en la
rama de un árbol.
El magistrado tomó declaración testimonial a amigos y
familiares de las dos muchachas, y a Ezequiel Fredes, de quien se afirma que
mantuvo relaciones sentimentales con Luján Peñalva. El juez especificó que en
este último caso, “se le tomó declaración en calidad de testigo sin juramento
de ley”
Farah hizo declaraciones a la prensa luego de estos trámites
en sede judicial y después de haberse reunido, en las primeras horas de la
mañana, con los padres de Yanina y Luján y el abogado de la familia Peñalva,
Alberto René Gómez.
En el diálogo con los periodistas y ante la pregunta de uno
de ellos sobre la carátula de la causa, el juez Farah dijo que “en este momento
inicial de la investigación la carátula de la causa no es tan terminante porque
estamos investigando un hecho como acontecimiento fáctico. Hasta acá la carátula
es netamente provisoria y no limita la investigación”.
Ratificó que “hasta acá la carátula es ‘muerte dudosa’ y va
a seguir con esa carátula todo el tiempo que necesario para incorporar, con un
criterio amplio de la investigación, todas las pruebas que sean necesarias para
tener el conjunto probatorio que después, valorado, nos lleven a la resolución”
del caso.
Sobre los supuestos mensajes de texto que tomaron estado público
y los testimonios aportados durante las primeras horas, el magistrado aclaró
que “no voy a adentrarme en cuanto al contenido de los testimonios. Sí les
puedo adelantar que se hizo referencia, tanto en las preguntas del Juzgado como
las del abogado de la familia Luján y del fiscal respecto de ese contenido”.
Al aludir a los cambios en la fecha en que habrían muerto
las dos jóvenes, dijo Farah que “el cambio no es tan sensible, es decir, entre
24 y 48 horas. No hubo ningún error. Lo que hubo fue una desinterpretación y
estamos siempre con un comentario que fue realizado en la precariedad (sic) del
momento de la realización de los exámenes de autopsia”.
Agregó que “tenemos que estar a las consideraciones de los médicos
legales que se van a realizar y que van a fundamentar esa data al momento del
informe final de la autopsia que va a ser mañana (por el viernes), junto con
los informes de toxicología”.
Ropa seca a pesar de
la lluvia
Una periodista le hizo ver al juez que cuando los cuerpos de
las muchachas fueron encontrados, las ropas de ambas estaban secas a pesar de
que el sábado y el domingo había llovido. Farah fue lacónico al responder: “Es
un dato a tener en cuenta”.
“Esta es una etapa netamente práctica, de recolección de
pruebas. La valoración de las pruebas es posterior. Ahora, de lo que se trata
es de recolectar la mayor cantidad de pruebas útiles y conducentes al
esclarecimiento del hecho”, insistió ante otra serie de preguntas que surgían
desde los periodistas presentes.
Precisamente, cuando se le requirió el tiempo que tomarían
estos pasos de recolección de pruebas, el juez señaló que “en el andamiaje del
proceso penal no podemos hablar de tiempo”.
Posteriormente, ratificó que “estamos haciendo una
investigación integral respecto de una muerte dudosa” y aseguró que este
viernes proseguirán las testimoniales.
Trozos de sangre y mancha
de sangre
También hizo saber el juez que “hay dos trozos de soga que
aportó la señora de la ferretería que fueron remitidas al Centro de
Investigaciones Fiscales (CIF) para que se las coteje con la soga hallada en el
lugar del hecho”.
Uno de los hechos más destacados que tuvo ratificación por
parte del magistrado fue el hallazgo de una mancha de sangre en la ropa de una
de las jóvenes. “Va a formar parte del informe del CIF”, aseguró Farah y afirmó
que “sí se verificó la mancha en el pantalón al momento de ser desvestido para
la autopsia. Vamos a ordenar estudios comparativos de ADN”.
Finalmente, expresó que “el CIF está trabajando sobre el
celular de una de las menores y también se aportó el celular de Ezequiel Fredes”.
Informe:
www.agensur.info
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