Benjamín Nolasco Toro
Por Nelson Francisco Muloni
Creador insaciable, llenando su “excedido cielo” con las ansias de su alma, se ha ido para siempre Benjamín Toro, dormido vaya a saber en qué mares, como su trilobite, que tanto lo sorprendía por su inmenso viaje desde el oleaje de los siglos hasta la puna. Había nacido el 17 de enero de 1939.