El canciller Santiago Cafiero en la Cumbre de las Américas.
Nacionales - Los cancilleres de los países asistentes a la Cumbre de las Américas se reunieron en vísperas
de las discusiones que llevarán a cabo los presidentes y terminaron de pulir los cinco compromisos políticos que dejará hacia adelante el encuentro hemisférico. Lavados en sus expresiones para lograr
consenso, las intervenciones verbales fueron la ocasión para cristalizar los disensos y reclamar cambios. La Argentina fue por ese camino.
En un desayuno de trabajo junto a sus pares de la región, el canciller Santiago Cafiero pronunció un encendido discurso contra el titular de la Organización de Estados Americanos (OEA), Luis Almagro, a quien el Gobierno detesta por entender que propició la abrupta salida de Evo Morales de la presidencia de Bolivia, y por su apoyo a la política belicosa del expresidente Donald Trump contra la Venezuela de Nicolás Maduro.
"La OEA nunca más debe legitimar procesos de desestabilización", lanzó Cafiero en una mesa redonda que estaba presidida por Almagro y el secretario del Departamento de Estado, Anthony Blinken. Enseguida, el canciller arremetió, como lo hiciera semanas atrás el Presidente, contra la política regional de sanciones.
Refiriéndose al documento sobre gobernabilidad democrática que verá la luz tras la Cumbre, Cafiero sostuvo que tal condición "no podrá alcanzarse si persisten las sanciones y medidas unilaterales que aún se llevan adelante en nuestra región". Fue una crítica abierta a la política norteamericana de embargos.
Para Cafiero, las sanciones contra los regímenes que conducen Miguel Díaz-Canel y Nicolás Maduro "han fracasado y solo han generado sufrimiento en la población".
"Repartir sanciones y bloqueos van en la dirección contraria a la búsqueda de herramientas efectivas para combatir la desigualdad. Si no somos nosotros, si nos son estos ámbitos los encargados de dar respuesta, de resolver injusticias que se prolongan en el tiempo, entonces ¿para qué estamos?", chicaneó.
En una rueda de prensa posterior, Cafiero reafirmó lo dicho frente a sus pares de la región.
"Las medidas unilaterales que se toman en el continente no sirve. Todos hablamos en contra de la desigualdad, pero luego hay muy poca acción cooperativa. Las sanciones y bloqueos va a contramano de cualquier tipo de práctica o herramienta eficiente entre países", insistió.
El ministro de Relaciones Exteriores reconoció que "no hay consenso en los documentos finales" de la Cumbre sobre temas espinosos, como el abordaje de la creciente migración, o la recuperación económica con inyección de créditos a los países en vías de desarrollo.
El jefe de la diplomacia también anticipó que el Presidente "está trabajando en un discurso en el que va a proyectar la necesidad de nuevos mecanismos de integración en una región que busca más oportunidades de desarrollo económico". Consultado acerca de si Alberto Fernández será la voz de Cuba, Venezuela o Nicaragua, excluidos de la cita regional, Cafiero sostuvo que "el Presidente se va a plantear como la voz de la sensatez".
Informe: EC
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